La Evolución de una Imagen...

Sessue Hayakawa
Actor Romántico de origen asiático

Desde pequeña mi mamá me enseño a diariamente contar mis bendiciones. También a ser agradecida con todo lo que la vida me trae (lo bueno, y no tan bueno).

Al observar la evolución del hombre aumenta mi esperanza para una futura sociedad multicultural. Pese a la injusticia sufrida que ensombrece nuestra historia humana. Sobre todo el racismo, lo cual es una ineludible realidad de nuestro mundo.

Cada raza tiene su historia de injusticias. El tema es infinito y aún queda mucho por aprender. Además es un tema que me inquieta mucho, y busco saber mas para presentar algunos detalles en este blog. Por lo general busco las historias con un impacto positivo en el tema del racismo. Digamos que busco "los finales felices". Una intensa busquedad tanto de información, como de esa imagen especial. La que tiene un significado y una historia de por si.

En una de estas incursiones, encontré un tesoro escondido (foto blanco y negro). El magnetismo de este hombre salta de la imagen. Sensualidad y tranquilidad a la vez. Su nombre es Sessue Hayakawa, un actor japonés de la era del cine mudo estadounidense. Me sorprendió saber que es un actor prinicipal romántico, que hipnotizaba a la audiencia con su único estilo de influencia zen. Lamentablemente, su fama decayó con la innovación de películas con sonido y el sentimiento anti-japonés resultado de la guerra mundial. Pero su historia me motivó para buscar mas...

Propaganda sentimiento anti-chino

La aportación del Dr. Seuss
al discrimen social...

Los efectos de las guerras, y el sentimiento anti-asiático hicieron del hombre asiático objeto de ridículo social, y de propaganda degradante (sobretodo en el cine y los dibujos animados). Sin importar su procedencia, y si su país estuviera en conflicto de guerra o no. Tanto japonés, chino, vietnamita, coreano, todos fueron víctimas del discrimen y hasta de la segregación (¿has escuchado sobre los campamentos de reclusión: internment camps?). Ironicamente, la mujer asiática comienza a ser mas codiciada, ¡hasta en nuestros días! 

Durante esos difíciles tiempos, mantuvieron a sus familias unidas y fijaron metas muy altas. En poco tiempo lograron reubicarse en buenos estándares sociales (menos indicios de divorcios; nivel educativo e ingresos altos).  Sin embargo su imagen continuaba siendo despreciada. Mayormente en la industria cinematografica. Los actores asiáticos sólo recibian roles secundarios (de existir algún personaje asiático), añorando revivir la época de oro de Sessue Hayakawa.

Luego de las guerras mundiales, trabajaron arduamente. Comienzan a disfrutar de sus esfuerzos, talento y devoción. Y los nombres de actores serios como: Philip Ahn, George Takai, Chun Yun Fat, comienzan a surgir, pero aún se les negaba las oportunidades de roles principales.

Bruce Lee & Jackie Chan:
imagen asiática insuperable

Al tiempo, aparece Bruce Lee, realzando la imagen de los asiáticos, y estableciendo un nivel altísimo con proezas de gran fuerza física. Jackie Chan también eleva los estándares con sus acrobacias quebradoras de huesos. Ya la denigrante imagen del asiático dientudo, con gruesas gafas comienza a transformarse en cuerpos esbeltos, llenos de nudos musculosos, y audaces acrobacias. Entonces, el hombre asiático se vuelve sinónimo de artes marciales. ¡Otro estereotipo mas! Mejor es  ignorar, y tomarlo como un cumplido o un extraño gesto de aceptación.

Con cada pelea de kung-fu comienza a "apaciguarse" la discriminación. Y surgen unos hombres altamente educados, quienes acuden al llamado de la actuación. Esto es, luego de honrar el pedido de sus familias de obtener una educación. Y así vemos una tendencia que viene a desplazar la antigua historia del pobre mesero sin educación que sueña con ser actor o ser descubierto.

¡Házte a un lado Brad Pitt!
¡Ahi viene Daniel Wu! 

Galanes graduados de reconocidas instituciones educativas. aparecen a las audiciones cinematográficas con un diploma universitario en su bolsillo, e impresionantes curriculum vitae. Vean a: Vic Chao, John Cho, Daniel Wu. Aún así, continuamos viendolos en roles secundarios. ¡Pero ya!  ¡Nos cansamos de esperar! Queremos verlos en mas roles principales. Así es que, ¡hazte a un lado Brad Pitt que por ahí viene Daniel Wu!

Sin duda la evolución de esta imagen es impresionante. Evolución que Norm Yip, fotógrafo ha captado en las imagénes de su libro "El hombre asiático" (The Asian Male). En su libro (bueno, tiene dos), Yip, elegantemente presenta el enigma de la delicadeza y la fuerza de la imagen del hombre asiático. Estas páginas si que hojearán con gusto.

Y, no he olvidado su presencia en los deportes. Me disculpan, es que no estoy en las de leer páginas deportivas. Quizás en un tema futuro.

Hoy día, vemos a talentosos asiáticos manteniendo sus estándares en un nivel muy alto. Con disciplina, esfuerzo, y sus hermosos rostros, estos hombres han dado un giro al sentimiento discriminatorio. Transformaron la negativa intolerancia hacia su raza en admiración, y la incondicional adoración de mujeres infectadas con la "fiebre amarilla". 

Salud, ternura y amor a-la-zen
(Takeshi Kaneshiro)

Sin duda, que presenciar esta evolución ha sido un placer. Ver como una injusta historia de discriminación emergió fuerte y hermosa. Prueba de esto lo vemos diariamente en todos los medios, sobre todo el internet, donde las sensuales imágenes de estos hombres logran captar altos niveles de "rating".  Un nuevo concepto de masculinidad nos ha llegado desde el lejano oriente. Es un perfecto balance entre , salud, ternura, y amor a-la-zen... ¡Adorable!


Una bendición, sin duda. Mas que eso una lección: la intolerancia racial sólo sirve para reprimir la belleza de una raza y la rica diversidad de una cultura, dejemos esa ignorancia de una vez. Disfrutemos de la evolución de imagen de todas las razas.